Brian Cowen tiene los días contados como primer ministro de Irlanda. Así lo ha anunciado el líder ecologista John Gormley, con quien el partido del premier gobernaba en coalición desde mayo de 2007.
Gormley quiere elecciones anticipadas en la segunda quincena de enero. Un calendario que deja margen al Ejecutivo irlandés para aprobar los presupuestos de 2011 y recortes por valor de 15.000 millones de euros para reducir el déficit en los próximos cuatro años.
El líder de Los Verdes fue inequívoco: "Desde que entramos en el Gobierno en junio de 2007, hemos trabajado para reformar la economía. Ha sido difícil. Hemos tomado decisiones difíciles y hemos puesto por delante el interés nacional. Pero ha sido una semana traumática para el electorado irlandés. La gente se ha sentido engañada y traicionada".
La decisión se tomó el sábado pero Gormley no la ha hecho pública hasta esta mañana. Presumiblemente para no interferir en la negociación del rescate europeo, que se cerró anoche en los pasillos de Bruselas. .
Los Verdes tienen seis diputados en el Parlamento de Dublín. Una representación modesta pero suficiente para cercenar la mayoría menguante del primer ministro, que se reducirá a sólo dos escaños si la región de Donegal cumple los pronósticos en los comicios parciales y vota este jueves por el candidato del Sinn Fein.
El horizonte de Brian Cowen no es muy halagüeño. Los últimos sondeos dicen que su partido (Fianna Fáil) sufriría una derrota humillante en unas elecciones anticipadas. Apenas lograría un 17% de los votos. Un porcentaje irrisorio si tenemos en cuenta que el partido no ha bajado del 39% desde las generales de 1927.
La semana pasada los laboristas y los conservadores de Fine Gael pidieron un anticipo electoral. Y la unidad monolítica del partido de Cowen se había empezado a quebrar en las últimas horas. El ex ministro Willie O'Dea escribía ayer en la prensa que "las acciones del Gobierno han minado la confianza de la ciudadanía". Y su colega John McGuinness decía: "Fianna Fáil debe cambiar y debe adelantar las elecciones por más que eso signifique una salida del Gobierno. Brian Cowen debe dimitir".
El Mundo