Una mujer estadounidense ha sido arrestada en Irán bajo la sospecha de espionaje. La detenida, de 55 años, fue arrestada en Nordouz -a 600 kilómetros de Teherán- cuando intentaba cruzar ilegalmente la frontera desde Armenia.
Según el rotativo oficialista 'Irán', la mujer llevaba consigo dispositivos para espiar, incluyendo un "micrófono implantado en los dientes". Se trata del cuarto ciudadano de EEUU que es detenido en Irán en dos años por presunto espionaje, un delito que puede ser castigado con la pena de muerte.
Tres estadounidenses serán juzgados en febrero tras haber sido detenidos en julio de 2009, cuando al parecer hacían senderismo en las montañas del Kurdistán iraquí. Shane Bauer y Josh Fattal aún se encuentran encarcelados, mientras que Sarah Shourd se encuentra en EEUU pagar una fianza de 500.000 dólares. El Mundo