quinta-feira, 24 de fevereiro de 2011

El presunto asesino del agente de Aduanas de EEUU en México dice que fue 'una confusión'

El ataque la semana pasada en México contra dos agentes de aduanas de Estados Unidos, uno de los cuales murió, fue producto de una confusión, según confesó a las autoridades el presunto líder de una célula de pistoleros, detenido el miércoles junto con cinco de sus secuaces.
Hace ocho días el agente del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) Jaime Zapata fue asesinado en el estado de San Luis Potosí de varios disparos cuando un grupo de desconocidos le sorprendió junto con su compañero, Víctor Ávila, con quien circulaba en un automóvil blindado.
La Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) y la Fiscalía presentaron este miércoles a Julián Zapata Espinoza y a sus cinco cómplices, todos miembros de una célula del cartel de 'Los Zetas' en San Luis Potosí.
Según la Sedena, Zapata Espinoza dijo que ese ataque "sucedió debido a una confusión" generada por las características del vehículo en el circulaban los agentes, similar a los empleados por delincuentes de un grupo rival.
El portavoz de la Sedena informó de que los seis presuntos delincuentes fueron detenidos por militares en San Luis Potosí, tras investigar cuatro guaridas. Asimismo fueron detenidas tres mujeres, una de ellas esposa de Zapata Espinoza, y un menor.
A los detenidos se les decomisaron cinco armas largas y una corta, cinco vehículos, uno de ellos blindado, dinero aún no cuantificado, 41 cargadores y documentación diversa, incluidas nóminas de pago a integrantes de la célula delictiva.
La Fiscalía solicitará al juez la prisión preventiva de los detenidos para continuar las investigaciones del caso. Zapata Espinoza cuenta con antecedentes penales y era investigado por diversos delitos federales, según la Fiscalía.
El agente estadounidense Zapata, de 32 años, vivía en Laredo (Texas) y estaba cumpliendo una misión temporal en México. El miércoles fue despedido en Brownsville (Texas), donde altos funcionarios estadounidenses prometieron hacer justicia.
El fiscal general de EEUU, Eric Holder, calificó al agente caído como un "héroe en todo el sentido de la palabra, un hombre cuyos actos de valor son un testimonio de lo mejor de nuestra comunidad nacional e internacional de las fuerzas del orden".
Según LA ICE, actualmente trabajan 30 agentes, más otros de la DEA y la Oficina Federal de Investigaciones (FBI), en Ciudad de México y otras localidades como Monterrey, Hermosillo, Guadalajara, Ciudad Juárez, y Durango. El Mundo