Los militares en retiro de Uruguay no están dispuestos a que nadie les estropee el reposo que se ganaron al jubilarse. En una carta dirigida al presidente José Mujica, los ex uniformados le exigen que ponga fin "al hostigamiento" de que son víctimas, desde que la Justicia reabrió las causas relacionadas con la violación a los derechos humanos, bajo la dictadura militar (1973-1985).
Los jubilados de las fuerzas armadas, que se agrupan en así llamado Foro Libertad y Concordia, le advirtieron a Mujica que algunos camaradas, dentro y fuera de esta organización, "están dispuestos a resistir" si se les cita a declarar o se les abre un proceso. El escrito no precisa qué tipo de resistencia opondrían esas personas.
Los dirigentes de esa entidad dijeron a la prensa que se considerantraicionados por el presidente, quien al asumir su cargo prometió que no habría revancha por los hechos del pasado.
"Creíamos de buena fe, que en Uruguay el tema de los derechos humanos ya estaba resuelto. Pensábamos que los que debían responder por atropellos en ese contexto, ya lo hicieron y que se abría una etapa de reconciliación. Nos encontramos con que este año se inicia con la apertura de numerosas causas judiciales que involucran a decenas de oficiales", expresaron los ex militares.
Amenazas de los ex militares
En el párrafo final se lee que "el presidente dijo palabras muy bonitas, pero nosotros queremos hechos porque de palabras bonitas estamos aburridos". Se ignora si acaso Mujica, un ex miembro de la guerrilla de los Tupamaros llegó a algún acuerdo confidencial con las fuerzas armadas, en el sentido de que no habría nuevos procesos. Pero el foro antes mencionado advierte que si prosiguen los juicios, ellos romperían su 'austero silencio'.
Simultáneamente, los ex oficiales enviaron otra carta al general (en servicio activo) Julio Rosales, en la que piden que haga oír su voz, ante el acoso del que sienten víctimas.
El coronel en retiro Gonzalo Pérez, miembro de la Comisión Directiva del Círculo Militar, dijo que en caso de ser llamado a declarar, él se resistirá. "No tengo ninguna esperanza que una vez detenido, se me hiciera justicia. No nos han dejado alternativas: perdido por perdido vamos a jugar a muerte", subrayó el alto oficial.
Desde Venezuela, donde se encontraba de visita, José Mujica respondió que "se hará lo que dicta la Constitución" y que no están en su poder dar órdenes a los fiscales o a los jueces. "En el Uruguay hay un orden y una Justicia que rige para todos y el Gobierno se tiene que mover en esos marcos". No obstante, el mandatario uruguayo envió una señal amistosa hacia el foro que lo emplazaba.
"Es gente que intenta defender lo que considera que son sus derechos", dijo. Desde el 2006, son doce los oficiales, entre ellos el ex dictador Gregorio Álvarez, que cumplen condenas en una cárcel especialmente habilitada para su reclusión. El Mundo
